El Sharon Rose Master JinYong Hong trabajó durante muchos años con Samsung Electronics, Texas Instruments y muchas otras empresas globales realizando trabajos relacionados con semiconductores. También obtuvo una licencia de una empresa extranjera para dirigir su propio negocio en Corea del Sur y participó en la fundación de una nueva empresa. Hong trabajó como nadie y tuvo una carrera brillante, pero siempre quiso ganar dinero rápidamente para poder obtener independencia financiera. Cuando era más joven, tuvo experiencia trabajando con una empresa estadounidense de mercadeo en red después de que lo iniciara un compañero de trabajo de la misma empresa. Estaba muy entusiasmado con eso, obtuvo buenos resulta-dos y ascendió bastante. Sin embargo, no duró mucho. Hong se dio cuenta de que las compras voluntarias no ocurrían en los negocios. “Después de que le presentaba los productos a la gente, muchos los usaban, pero nunca los volvían a comprar. Siempre tenía que encontrar gente nueva y, al final, las únicas personas que quedaban para usar todos los productos eran otras personas que trabajaban en el mismo negocio”.

Un negocio donde la compra es voluntaria

Hace unos tres años, JinYong Hong volvió a tener un encuentro con el mercadeo en red. Su antiguo patrocinador se acercó a él. Lo primero que dijo fue: “¿Te gustaría probar el mercadeo en red si hay compras voluntarias?”. Hong estaba intrigado, pero como había fallado una vez, no quiso volver a intentarlo. Lo que lo hizo cambiar de parecer no fue el plan de mercadeo, fueron los pro¬ductos de Atomy. 

“No gozaba de buena salud y nada de lo que probaba parecía ayudarme; pero después de tomar HemoHIM por tres meses, me di cuenta de que me sentía mejor”. 

Si iba a hacer negocios con Atomy mientras trabajaba, la ayuda de su esposa era fundamental. Sin embargo, su esposa se oponía rotundamente al negocio de Atomy. 

“Mi esposa trató de detenerme y lloró hasta la mañana . Ella pen¬só que había hecho suficiente. Si ni siquiera podía tener éxito con una empresa líder en el sector, ¿cómo se suponía que iba a tener éxito con una coreana? Me dijo que ni se me ocurriera llevar los productos a casa”. 

A medida que Hong ganaba socios, tenía que asistir a seminarios con ellos, pero tenía que estar en el trabajo durante el día. Le pre¬guntó a su esposa nuevamente y le dijo que sería solo esta vez. Su esposa accedió. Y después de asistir a un seminario, se convirtió en alguien diferente. Ella pensó: ‘¿Venden estos productos a estos precios?’. 

No fue necesario explicarle el plan de mercadeo ni el programa de compensación de Atomy. Después de usar los productos que presentó, la gente lo contactó inmediatamente con interés. 

“Siempre que hablaba sobre el negocio de Atomy con la gente, se convertían en un cliente o un compañero de negocios”.

Potenciar a los líderes con educación israelí Habruta

El maestro de Sharon Rose JinYong Hong tiende a preocuparse mucho por la educación de sus socios. Las “reuniones en línea” que dirige separadas de las reuniones regulares del centro de Atomy son parte de sus herramientas comerciales. También se comunica activamente con socios en el extranjero a través de reuniones web. Sus reuniones en línea generalmente involucran a unas 25 personas, incluidos socios extranjeros en EE. UU., Indo­nesia, etc. Hay conferencias web dedicadas a los socios chinos.

Da conferencias breves y cada persona comparte su estado co­mercial de la semana anterior. Sus reuniones en línea tienen excelentes críticas porque es fácil asistir a ellas, incluso para las personas que rara vez visitan los centros.

“Para algunos, las reuniones web son más efectivas porque son más inmersivas y privadas que las reuniones presenciales”.

Para los socios que estén ansiosos por aprender más, ofrece capa­citación en liderazgo por separado. Utiliza el estilo israelí Habru­ta, conocido como el método de aprendizaje de los genios, y hace que todos digan lo que piensan y debatan al respecto. Después de una reunión de unos 30 minutos, los participantes dan discursos en grupos el resto del tiempo mientras se graban para que todos puedan evaluarse.

Pensando en el “por qué” antes de “qué”

“Todas las empresas necesitan tres elementos: QUÉ, CÓMO y POR QUÉ. Es una pena que mucha gente se enfoque en el “QUÉ” en lugar del “POR QUÉ”. Mucha gente se lanza al negocio de Atomy con solo ver la visión prometedora de Atomy. Después de algunos rechazos, se sienten decepcionados y desanimados o paran y se rinden. Esto se debe a que solo piensan en el “QUÉ”, no en el “POR QUÉ”. “Es lo mismo para muchas empresas globa¬les. No promocionan los productos que ofrecen. Más bien, el por qué existe su corporación. Apple es un gran ejemplo de esto”. JinYong Hong usa la capacitación al compañero para enseñar a pensar en el “por qué”. Él cree que una vez que se puede ex¬plicar el “POR QUÉ”, el “QUÉ” y el “CÓMO” vienen sin esfuerzo. Gracias a su experiencias multiculturales, Hong también confía en su capacidad para expandir la red en el extranjero. El año pasado, envío productos a socios en lugares donde las oficinas globales se están preparando para abrir, y ayudó a su creci¬miento invitándolos a Corea. Él cree que una vez que estos so¬cios extranjeros puedan establecerse en el mercado, podrá dar un paso más hacia los ingresos estables y sistemáticos con los que siempre ha soñado.

Los criterios de contenido, tales como las maestrías, se basan en la revista THE ATOMIANS 2020 (publicada en junio de 2020).